Los bolardos FAAC permiten gestionar el flujo de tráfico de automóviles, sin impedir llegar a los lugares circunscritos a pie o en bicicleta. Gracias a los bolardos, a menudo se crean agradables e interesantes itinerarios por los que redescubrir y destacar zonas históricas o menos conocidas en nuestras ciudades.
Todo ello sin olvidar la estética. De hecho, FAAC también propone modelos que se ocultan que, además de no interferir con el paisaje, no requieren de zonas de maniobra libres: sólo hay que bajarlos para permitir la circulación de vehículos.
Siempre hay una solución para todos.
¿La zona a delimitar es difícil de cablear? En este caso, el modelo de bolardo más indicado es semiautomático: se baja de forma manual y sube automáticamente, mediante una llave de desbloqueo.
Stop a los vehículos, vía libre a la calidad FAAC.
La libertad de un espacio propio es también una cuestión de fiabilidad. La amplia gama de bolardos FAAC resuelve cualquier necesidad de aplicación con una tecnología hidráulica que representa una excelencia tecnológica mundial, componentes de muy alta calidad y, no menos importante, la exclusiva filosofía «Design for Assembly», que ha diseñado productos capaces de simplificar la instalación y el mantenimiento, fases cruciales de cualquier montaje.